Al noroeste de España una pequeña zona vitivinícola destaca por su belleza y calidad: Rías Baixas enamora a quien la conoce.
Rías Baixas es una región vinícola ubicada en Galicia, España, que goza de paisajes únicos en el país. Esta región productora de maravillosos vinos blancos enamora a quien la visita, sus increíbles vistas son capaces de quitarnos el aliento y transportarnos a épocas antiguas donde el vino era tan tradicional y común como los alimentos que se consumían.
La historia de la Denominación de Origen Rías Baixas comienza en 1980, cuando se le otorga este reconocimiento de Denominación Específica Albariño en octubre. Cuatro años más tarde, se aprueba el Reglamento de la Denominación Específica Albariño y de su Consejo Regulador.
Desde entonces al día de hoy la región ha crecido notablemente, pues pasó de tener 492 viticultores a 5059, de 14 a 161 bodegas, y de una superficie de viñedo de 237 hectáreas a 2408.
Particularidades de la zona
Esta zona vinícola tiene características muy específicas que benefician su producción. Sus tierras cercanas al mar poseen una altitud general inferior a 300 msnm, lo que ocasiona una gran influencia atlántica que resulta en temperaturas suaves y precipitaciones elevadas, con pocas lluvias en los meses de verano; esto propicia la correcta maduración de las uvas.
Los vinos de la Denominación son considerados vinos Atlánticos, con inviernos moderados y veranos cálidos. Una idea de la suavidad del invierno es que durante enero, el mes más frío del año, la temperatura oscila los 10 °C; en cuanto a las precipitaciones, la estación es muy lluviosa con aproximadamente 600 mm, lo que representa más de la tercera parte de las lluvias totales anuales que se registra en cerca de los 1600 mm.
La primavera es temprana y lluviosa. Es una época donde son comunes las heladas y el corrimiento de flor; los riesgos de heladas son más comunes hacia el interior de la zona y poco usuales en la zona costera. Durante el verano las precipitaciones son poco frecuentes y las temperaturas se mantienen moderadas gracias al aire fresco. En esta estación se produce una importante sequía, ya que los suelos arenosos de la zona facilitan la infiltración.
El estilo de los vinos
Los vinos se producen con diferentes tipos de uvas en esta zona; las variedades blancas preferentes son: Albariño, Loureira blanca o Marqués, Treixadura y Caiño blanco. Y las tintas: Caiño tinto, Espadeiro, Loureira tinta y Sousón. Sin embargo, también están permitidas las blancas Torrontés y Godello, y las tintas Mencía, Brancellao y Pedral.
La Denominación de Origen Rías Baixas tiene diferentes tipos de vinos:
- Rías Baixas Albariño: vino monovarietal elaborado 100 % de uvas Albariño.
- Rías Baixas Condado do Tea: elaborado con uvas Albariño y Treixadura en 70 % como mínimo, el resto son variedades admitidas en la subzona del Condado do Tea.
- Rías Baixas Rosal: elaborado a partir de uvas Albariño y Loureira en 70 % como mínimo, el resto son variedades admitidas en la subzona de O Rosal.
- Rías Baixas Val do Salnés: elaborado a partir de uvas Albariño en 70 % como mínimo, el resto consiste de variedades admitidas en la subzona Val do Salnés.
- Rías Baixas Ribeira do Ulla: elaborado a partir de uvas Albariño en 70 % como mínimo, las demás son variedades admitidas en la subzona Ribeira do Ulla.
- Rías Baixas: elaborado a partir de las variedades blancas reconocidas, producidas en cualquiera de las subzonas y utilizando al menos un 70 % de uvas de las variedades preferentes.
- Rías Baixas barrica: procedente de vinos definidos anteriormente, que permanece en madera de roble por un mínimo de tres meses.
- Rías Baixas tinto: elaborado con las variedades tintas reconocidas, producidas en cualquiera de las subzonas.
- Rías Baixas espumoso: elaborado con las variedades reconocidas, producidas en cualquiera de las subzonas, cumpliendo los límites analíticos estipulados en el Reglamento del Consejo Regulador, la normativa nacional y comunitaria referente a los vinos espumosos de calidad y los que se establezcan en el Manual de Calidad.
Armonía con platos de tradición
Los vinos de Rías Baixas son cada vez más reconocidos por su calidad y acumulan premios en las más prestigiosas catas de todo el mundo. Por sus características, armonizan a la perfección con pescados o mariscos, que además se producen en la zona con excelencia.
Galicia es, sin dudarlo, uno de mis lugares favoritos, reconocido a nivel mundial por su excelente gastronomía. Una de las grandes ventajas con las que cuenta es que la materia prima tiene una calidad incomparable gracias a que las aguas frías del Atlántico y las rías de agua salada son el escenario perfecto para encontrar almejas, ostras y mejillones de un sabor inigualable.
Uno de los platos icónicos de la zona es el pulpo, que se prepara de forma sencilla con aceite de oliva y pimentón, donde su frescura se deja resaltar; los percebes, calamares y las vieiras también son platillos que encabezan la lista de los predilectos de la zona. Dentro de los pescados la variedad es amplia, podemos encontrar xoubas (sardinillas), lampreas, merluza y por supuesto, angulas.
Por otro lado, las carnes también alcanzan excelente calidad, ya que los animales crecen en condiciones óptimas para su desarrollo, dando como resultado un sabor sorprendente. Los productos derivados de cerdo, cordero y ternera son los más destacados.
Dentro del espectro de maravillosos platillos, también podemos encontrar postres con un sello particular gallego, tales como la leche frita, el arroz dulce (arroz con leche), las filloas (que son una especie de crepa), las chulas (similares a un pan francés), y las torrijas (parecidas a las tejas de almendra). Las tostadas de vino son uno de mis preferidos, ya que se elaboran como una chula, pero en lugar de sumergir el pan en huevo, se sumerge en vino tinto, para después freír y espolvorear con azúcar: el postre soñado de cualquier amante del vino.
Comentarios